Categorías
Bebé 12 meses, 1 año Bebé de 11 meses Bebé de 15 meses Bebé de 2 meses Bebé de 4 meses Blog Botiquín para atender Bebés y Niños Control del Tiempo en Salud Infantil Cuidados del Bebé y el Niño Diarrea Digestivas Dolor fiebre Graves Herramientas de Salud Infantil Infecciones en Bebés y Niños Respiratorias Síntomas del Bebé y el Niño Enfermos

Calendario Vacunal 2020 en España

Recomendaciones de vacunación en España de la Asociación Española de Pediatría en 2019

El Calendario Vacunal 2020 es el aplicable en toda España a los nacidos a partir del 1 de Enero de 2020. Te lo explicamos con sus novedades.

El Calendario Vacunal 2020 es común a todas las comunidades autónomas

Hace ya unos años que se llegó al acuerdo de que los calendarios vacunales de las distintas comunidades autónomas fuesen similares en toda España. Esto fue un paso importante ya que hasta entonces cada Comunidad establecía un calendario según sus propios criterios. Esta unificación facilita el cumplimiento especialmente en aquellos pacientes que se desplazan con frecuencia. Ya que antes de esta unificación era un poco desquiciante.

De hecho este calendario es ya muy similar en la mayoría de países desarrollados. Ya que el consenso científico es ya global.

Los cambios más llamativos para los nacidos a partir del 1 de Enero de 2019 en el Calendario Vacunal:

Este año no hay muchos cambios. Para los que no se enterasen en los años previos:

  • Aparece una vacuna nueva ya incluida en calendario con el Nombre de MenACWY. Es la vacuna del Meningococo para 4 serotipos diferentes: A, C, W, Y. Esta vacuna se comercializa en España con el nombre de Nimenrix y el objetivo es sustituir a una que ya estaba en el calendario y cubría sólo contra el Meningococo C. Al no tratarse de una vacuna más a añadir, sino de una más completa que sustituye a una ya incluida, es fácil que la sustitución se vaya haciendo en poco tiempo en todas las Comunidades Autónomas. Muchas comunidades la han incorporado ya a los 12 meses y 12 años.

En la práctica y reduciendo, a un niño normal le corresponden vacunas a los:

2 meses, 4 meses, 11 meses, 12 meses, 15 meses, 3 años, 6 años, 12 años y 14 años.

Basta con que acudas al Centro de Salud más cercano a casa y pidas cita para que lo vacunen. El personal sanitario encargado del programa de vacunación sabrá qué corresponde ponerle en cada una de esas edades. No te preocupes por eso.

El Calendario Vacunal 2020 es gratuito para todos los niños que residen en España. Da igual si tu cobertura sanitaria es Pública o te la da un Seguro Privado.

Estas vacunas no pueden ser compradas por particulares. Se distribuyen gratuitamente y en exclusiva por las Consejerías de Salud.

Sólo quedan fuera del Calendario Vacunal 2020 tres vacunas que puedes poner a tu hijo:

Pulsa sobre el enlace de cada una y te llevará a un artículo específico en el que te hablo de ellas si deseas más información.

Consideraciones sobre las vacunas de Meningitis en niños

Como habréis notado en los últimos años han ido saliendo varias vacunas nuevas para la Meningitis.

La Meningitis es una de las infecciones más graves que pueden sufrirse. Aún hoy en día con tratamientos potentes y medios modernos el 10-20% de los pacientes que tienen una meningitis bacteriana mueren y en torno a un 30% quedan con secuelas.

Pero durante las últimas dos décadas su frecuencia ha bajado claramente. Cuando yo empecé la especialidad de Pediatría hace ya más de 20 años, veíamos meningitis con frecuencia. Había épocas en las que en nuestro hospital había ingresadas varias meningitis a la vez.

Ahora se pasan los meses sin ver ninguna.

Y esto es gracias a las vacunas.

Son varios los gérmenes que pueden causar meningitis. Pero poco a poco han ido saliendo vacunas que cubrían a cada tipo (hemófilus, neumococo, Meningococo C, Meningococo B, Meningococos ACWY).

Sigue habiendo casos. Pero ya se reducen a pocos cientos al año, cuando antes eran miles.

Categorías
Bebé de 2 meses Bebé de 3 meses Bebé de 4 meses Bebé de 5 meses Bebés sin Cólicos Blog Edad del Bebé o Niño Primer Mes de vida del Bebé

Cólico del Lactante ¿Puede resolverse en días?

Cólico del Lactante. Realmente muchos de ellos pueden resolverse en pocos días.

#Bebéssincólicos Lo que describo en este libro no es palabrería, ni una ocurrencia que creo que puede ayudar a que los niños dejen de llorar. Son 10 años de experiencia de un Pediatra formado científicamente para abordar un problema concreto de forma científica. Ha dado sus frutos y quiero compartirlos tanto con las familias como con otros profesionales. Bienvenida sea toda experiencia que ayude a mejorar el resultado.

Un Cólico del Lactante es según los Criterios de Roma de 2016:

Vamos a desgranar esta definición del Cólico del Lactante:

1º- Aparece y desaparecen si no hacemos nada en los primeros 5 meses de vida

Durante mucho tiempo se ha atribuido a una inmadurez del intestino. Pero eso es un concepto muy general. Lo que he hecho en este libro es repasar las principales adaptaciones que hace en esa maduración durante estos primeros meses de vida.

2º- Episodios recurrentes y prolongados de llanto que los cuidadores no logran resolver

Es lo que llamo llanto inconsolable. El llanto es la forma que tiene el bebé de comunicar una necesidad sin cubrir o dolor:

  • El primer paso por tanto debe ser aclarar cuales son las necesidades del bebé y cómo cubrirlas adecuadamente.
  • Una vez cubiertas, si el llanto persiste debe haber dolor. Y todo dolor tiene una causa y por tanto una forma de resolverlo. Pero hay muchas causas posibles de dolor abdominal recurrente en un bebé. Desgranar esas causas es lo que he hecho en el libro.
  • Esto no es algo que haga yo. Lo hace cualquier pediatra. Lo que yo aporto es una sistematización de este problema que permite hallar con más facilidad esas causas.
  • No he descubierto la pólvora, sino una forma más eficiente de producirla.

3º- No hay fallo de medro, fiebre o enfermedad

Ninguno de los problemas descritos en el libro causan fiebre.

Todos los problemas descritos en el libro pueden en su forma leve permitir una ganancia de peso adecuada. En sus formas más intensas cualquiera de ellos puede afectar a esa ganancia de peso.

En mi opinión es un error dejar pasar el malestar evidente del bebé simplemente porque el peso no esté siendo afectado. Porque si hay llanto inconsolable recurrente y persistente debe haber una causa, un problema.

En los casos en los que estos problemas afectan al medro, es cuando suelen saltar las alertas, se estudia y aparecen causas definidas. Podemos hacer lo mismo desde que el primer signo, que no es otro que las crisis de llanto inconsolable recurrentes, nos dicen que algo va mal.

Algunos me han dicho que si encuentro una enfermedad en un niño catalogado de Cólico del Lactante, por definición ya no lo es.

Y esa es precisamente mi hipótesis: Que todo llanto inconsolable recurrente es causado por una enfermedad, luego el Cólico del Lactante no existe.

Lo que falta en la definición de Cólico del Lactante de los Criterios de Roma IV

Cualquier pediatra que quiera profundizar mínimamente en el Cólico del Lactante se da cuenta de que es imposible encontrar una solución para un problema en el que no se define más que un patrón de síntomas común, sin etiología, sin fisiopatología y por tanto sin posibilidad de atacar el problema. Porque en la propia definición de Cólico del lactante de los criterios de Roma de 2016 va implícita la admisión de que no entendemos lo que ocurre.

Mi libro es un esfuerzo desde el conocimiento científico y experiencia como Pediatra para establecer Etiologías (causas), Fisiopatología (mecanismos del cuerpo ante esas causas) y a partir de ahí buscar un diagnóstico lo más rápido posible, con el mínimo consumo de recursos técnicos y tratamientos para esas causas.

No hay más. ¡Ni menos!

Espero que lo leáis, lo disfrutéis, os resulte útil y me hagáis llegar vuestras recomendaciones y experiencias para mejorarlo.

Tal como expongo en la imagen, algunos de estos problemas pueden resolverse en pocos días. Entendiendo por resolver, que el niño deje de sufrir crisis de dolor inconsolable y sus padres entiendan cómo evitarlas en el futuro.

Categorías
Bebé de 2 meses Blog Diarrea Digestivas Edad del Bebé o Niño Infecciones en Bebés y Niños Síntomas del Bebé y el Niño Enfermos

¿Por qué mi ??Bebé hace el ?popó verde??

Explicación de por qué mi bebé hace la caca verde

Te explico brevemente porqué hace un 👶🏻bebé la 💩Caca Verde a veces. Si implica algún problema y cómo actuar. El popó puede cambiar mucho de color.

Este artículo es parte de una serie en la que quiero desterrar mitos.

Por eso voy a centrarme en:

  • Porqué los bebés hacen cosas llamativas.
  • A qué suele atribuirlo erróneamente la gente.
  • Qué te suelen recomendar sin razón que hagas.
  • Lo que realmente hace que esto suceda.
  • Qué deberías hacer.

Los Bebes con frecuencia hacen popó verde

caca verde en bebé

Pues sí. La caca de un bebé que toma sólo leche puede ser blanquecina, amarillenta, anaranjada, distintas tonalidades de marrón, negruzca y verde.

El verde puede ir desde un verde limón casi amarillento hasta un verde aceituna oscuro, casi negro.

Caca verde en bebé sin diarrea
Esta caca es verde, pero tiene una consistencia normal. No es diarrea. Simplemente la bilis no ha sido digerida.

A qué suele atribuir la gente el color verde del popó

Es muy frecuente que te digan que es diarrea o que tiene intolerancia a la lactosa. Te aclaro al final que no tiene porqué ser así.

Qué suelen recomendar que hagas si la caca de tu bebé es verde

No es raro que te alarmen diciendo que debe estar enfermo y tienes que llevarlo al pediatra.

Otros directamente te recomiendan que le des algún probiótico para la diarrea.

En algún caso hay quien dice que debes cambiar la leche por una sin lactosa, si toma biberón o que la madre debe dejar de tomar lactosa.

De nuevo son recomendaciones que hay que matizar.

Lo que realmente hace que tu bebé tenga verde el popó

El color de la Caca depende de qué ocurre con las sales biliares. Esta secreción del hígado se vacía sobre el alimento en el intestino delgado para ayudar a la digestión de las grasas.

El color de la bilis es verde oscuro, casi negro.

Los gérmenes que hay en el intestino pueden romper las sales biliares. Y dependiendo de cómo lo hagan pueden cambiar su color a amarillo o marrón.

Si el paso de la caca es rápido y no da tiempo a que las sales biliares se rompan el popó es verde. Pero en los bebés este paso es bastante rápido sin que haya problemas.

Si los gérmenes que hay en el intestino no rompen la bilis, la caca es verde. Sean esos gérmenes buenos o malos, agresivos o no, pueden romper o no la bilis.

Qué deberías hacer si la caca de tu bebé es verde

Pues depende:

  • Si tu hijo hace de repente la caca verde, pero no tiene ninguna molestia, sigue comiendo bien y la piel alrededor de su ano no está irritada, no es necesario que hagas nada. Ha cambiado la flora de su intestino. Los gérmenes nuevos pasan de la bilis. Pero no son malos y al bebé le da igual.
  • Si con el cambio de color has notado que claramente tiene molestias, come peor o tiene dermatitis del pañal porque la caca se ha vuelto ácida, sí que es signo de que los gérmenes que hay en la tripa son más agresivos y hay que cambiarlos:
    • Dale un probiótico hasta que se revierta la situación. Es decir hasta que desaparezcan las molestias, aunque la caca siga siendo verde.
    • Si toma leche artificial debes cambiarla unos días por leche sin lactosa. Es típico en la intolerancia a la lactosa que el bebé tenga diarrea ácida verdosa con muchos gases y dolor de barriga.
    • Si toma pecho puedes seguir tomando lactosa sin problema. La lactosa que toma la madre se digiere para absorberse. La que hay en la leche materna la ha producido el propio pecho y va acompañada de lactasa, que la digiere, con lo que quitar la lactosa de la dieta materna no influye para nada.

Como ves lo que dice la gente y la realidad tiene algunos puntos en común, pero es porque la mayoría de la gente no tiene las ideas claras o recuerdan algo de información parcial en el mejor de los casos.

Categorías
Alimentación del Bebé y el Niño Alta Demanda Bebé de 2 meses Blog Dolor Edad del Bebé o Niño Estreñimiento Otros temas de Salud Infantil Porteo Qué hacer si mi bebé.... Síntomas del Bebé y el Niño Enfermos

100 Cólicos del Lactante resueltos

Os presento un estudio realizado por mí en el que se resolvieron 100 casos de Cólicos del Lactante en 3 años. Sirve como ejemplo de mi forma de trabajar este problema. La clave es entender que no es una sola patología, sino la superposición de varias.

Desde 2010 llevo aplicando un nuevo planteamiento sobre el cólico del lactante que parte de tres premisas:

  1. No hay una entidad única que explique los Cólicos del Lactante.
  2. Pero con un diagnóstico diferencial adecuado debemos poder resolver cualquier Cólico del Lactante identificando sus causas.
  3. Reducir lo más posible el tiempo y las pruebas complementarias necesarias para lograr la mejora de los síntomas y el diagnóstico de las causas.

En primer lugar debemos definir qué entendemos por Cólicos del Lactante:

Deben cumplir todo lo siguiente:
1. Inicio y fin de los síntomas en los primeros 4 meses de vida.
2. Episodios repetidos de llanto inconsolable, referidos por los padres, sin causa aparente y saben ser prevenir ni resolver.
3. Con buena ganancia de peso, sin fiebre ni otros signos de enfermedad evidentes.

Para fines de investigación, debe cumplir los criterios diagnósticos previos y además incluir los dos siguientes:
1. Los padres estiman una duración de llanto de tres o más horas diarias durante tres o más días a la semana.
2. Duración confirmada de 3 horas o más cuando se registra en un diario de la conducta del bebé de 24 horas.

En mi consulta en el Hospital Inmaculada de Granada (España) he atendido, entre 2014 y 2017, 100 casos de bebés que cumplen estos criterios, y que se han resuelto mediante diagnóstico diferencial con intervenciones definidas en función de su causa.

100 casos de Cólicos del Lactante resueltos

Planteamiento teórico:

Los Cólicos del Lactante son una agrupación artificial de casos en los que lo único común es el llanto del bebé y una falta de diagnóstico sobre su causa.

Llevamos años buscando una causa.

Asumo que son muchas las causas, que en cada niño puede haber varias simultáneas y que debemos tener un protocolo de diagnóstico diferencial y tratamiento que nos permita actuar para corregir las causas.

En mi experiencia he encontrado una serie definida de problemas que se repiten una y otra vez en casos catalogados como Cólicos del Lactante y que pueden agruparse en 4 categorías:

  1. Crianza. Prácticas que favorecen la irritabilidad del Lacante por no cubrir adecuadamente sus necesidades en:
    1. Estímulos.
    2. Alimentación.
  2. Flora intestinal que genera una fermentación con gases excesivos.
  3. Alergias / Intolerancias alimentarias:
    1. En los bebés alimentados con Lactancia Artificial, problemas con:
      1. Proteínas de la Leche de Vaca.
      2. Lactosa.
    2. En los alimentados con Leche Materna:
      1. Proteínas de la Leche de Vaca.
      2. Otros alimentos de la dieta Materna.
  4. Trastornos evolutivos. Llamo así a cambios normales en los primeros meses de vida de cualquier bebé, pero que en los Cólico del Lactante han tenido fallos que generan un problema:
    1. Estreñimiento. Por una Pauta incorrecta de alimentación o una digestión inadecuada que da lugar a heces duras.
    2. Pseudoestreñimiento del lactante. Por una falta de coordinación en la relajación del ano para permitir el vaciado intestinal una vez que el esfinter anal ha adquirido fuerza.
    3. Reflujo Ácido: Por un exceso de producción de ácido gástrico.

Estos problemas no sólo pueden coexistir. Lo normal es que lo hagan y que se potencien entre sí.

Vamos a abordarlos uno por uno.

Pauta de Estímulos Inadecuada

Los niños necesitan estímulos para desarrollar su cerebro.

Hay estilos de crianza que limitan claramente estos estímulos:

– Limitando el contacto con los padres.

– Dejando a los niños en una postura constante durante más tiempo del tolerado por el niño.

– Limitando la variedad de estímulos a los que el niño tiene acceso.

Dejar un niño en la cuna sin contacto con sus padres, en una postura que el bebé no puede cambiar y con acceso a unos estímulos escasos y sin variación es normal que genere ansiedad y malestar al bebé.

Hay niños en los que esta necesidad de estímulos es más marcada que en otros. Son los llamados niños de Alta Demanda. Existen y tienen unas características claras:

  • Duermen muy poco durante el día. Si lo hacen es mientras siguen recibiendo estímulos (sobre los padres o en ambientes muy saturados de estímulos como celebraciones o calles bulliciosas).
  • Piden de forma muy intensa lo que necesitan, cediendo el llanto cuando se les proporciona.
  • Para comer manifiestan mucha ansiedad pero pierden el interés enseguida, distraídos con cualquier otro estímulo.

Criterio de Inclusión:

La Clave para incluir esto en el cóctel de causas es que algunas de las crisis de llanto del bebé ceden cuando se le dan estímulos cambiantes.

Recomendación:

Pauta de crianza que aporte al bebé los estímulos que necesita de la forma más llevadera para los padres. La solución que más ayuda es el Porteo.

Pauta de alimentación Inadecuada

Todo niño que se queda con hambre llora mientras tenga fuerzas para hacerlo.

Hay estilos de crianza que limitan el acceso del lactante a la leche:

– Estableciendo horarios rígidos de alimentación.

– Limitando la cantidad que puede tomar en biberón o el tiempo que puede estar al pecho.

– Sustituyendo la leche por infusiones o chupe.

Si como resultado de ellas el bebé tiene una sensación subjetiva de hambre no satisfecha, llorará por hambre.

Pero además, al comer con ansiedad tendremos un aumento de los gases intestinales.

Criterio de Inclusión:

La Clave para incluir esto en el cóctel de causas es que algunas de las crisis de llanto del bebé ceden cuando se le da de comer sin limitación temporal ni de cantidad.

Recomendación:

Pauta de alimentación que aporte al bebé alimento siempre que lo pida, y sin límite de cantidad. 

Si durante el día espacia más las tomas que en la tarde-noche recomiendo despertarle durante el día para ofrecerle de comer con la frecuencia que el bebé pide en su momento de máxima demanda.

Esto es importante especialmente en lactancia materna.

Muchos niños tienen un desajuste entre las horas en las que el pecho produce más leche y las horas en las que el niño pide más alimento.

Esto impide un aumento adecuado de la producción de leche materna para cubrir las necesidades del bebé y que coma con ansiedad cuando menos leche hay.

Mejora si:

– Mantenemos una pauta de iluminación definida en la que haya mucha más luz de día y la mínima posible de noche.

– Despertamos al bebé con más frecuencia para tomar en las horas en las que más leche materna se produce: Mañana, Inicio de la tarde.

Dando más alimento y estímulos durante el día, el bebé llega a las horas críticas del cólico con sus necesidades cubiertas y más sueño.

Flora Intestinal Inadecuada

Cuando un niño nace empieza a ser colonizado por los gérmenes de su entorno.

Hay circunstancias que pueden favorecer la colonización por gérmenes inadecuados:

– Nacimiento por Cesárea.

– Tratamientos antibióticos por Riesgo Infeccioso Neonatal.

– Medio Hospitalario.

– Exceso de Higiene.

Durante los primeros meses de vida esa flora va a ir cambiando constantemente.

Hay momentos en los que puede haber una parte importante de esa flora que:

– Fermente produciendo más gases. Lo que genera dolor abdominal por exceso de presión.

– Produce irritantes que agreden a la mucosa intestinal, produciendo dolor y una motilidad intestinal inadecuada, con la consiguiente retención de gases y heces que genera dolor, de nuevo, por presión excesiva.

Otras patologías implicadas en el Cólico del Lactante y las intervenciones que hacemos para resolverlas (como un cambio de leche) pueden cambiar esa flora dando entrada a gérmenes perjudiciales.

Criterios de Inclusión y Recomendación:

Yo añado el tratamiento con Probióticos en todos los casos del estudio. Concretamente se han tratado con Lactobacilo Reuterii. 

Le sienta mal la leche de vaca

Algunos bebés tienen problemas para digerir la Leche Adaptada de Inicio.

Proteínas de la Leche de Vaca

Criterios de Inclusión:

– Bebés con dermatitis atópica llamativa.

– Vómitos tras las tomas.

– Malestar tras las tomas.

– Dermatitis del pañal frecuente.

Recomendaciones:

La analítica para detectar anticuerpos sólo identifica los casos con Alergia mediada por IgE. Pero no los de Alergia no mediada y los de Intolerancia.

Por tanto la prueba más fiable es la eliminación de la leche de vaca de la dieta.

Si mejor y empeora al reintroducirla mantendremos la leche fuera de la dieta del bebé.

En los casos en los que el vevé toma sólo leche materna debemos eliminar la leche de vaca de la dieta de la madre durante 2 semanas. Suele apreciarse la mejoría entre 3 y 10 días después de la eliminación total.

Si mejora y al reintroducir la leche en la dieta materna hay un empeoramiento claro de los síntomas en menos de 48 horas mantendremos una dieta exenta de leche de vaca en la dieta materna.

Intolerancia a la Lactosa

Criterios de Inclusión:

– Dermatitis del Pañal frecuente.

– Diarrea ácida.

– Malestar tras las tomas.

– Gases abundantes.

Recomendaciones:

En la lactancia materna exclusiva es muy raro que haya síntomas de Intolerancia a la Lactosa. Se puede producir en algunos casos en los que no se permite al bebé vaciar un pecho antes de pasar al siguiente. La única medida en los que toman pecho es por tanto que se permita al bebé tomar el pecho sin cambiarlo hasta que no muestre rechazo por él.

En lactancia artificial probaremos a sustituir la leche de inicio normal por una fórmula sin lactosa. Si hay una mejora clara en 2-5 días. Reintroducimos la leche con lactosa y si empeora claramente, mantendremos la Fórmula Sin Lactosa.

Estreñimiento

Criterios de Inclusión:

Entendemos por estreñimiento hacer las heces duras y con dolor. 

El estreñimiento real puede generar dolor al intentar defecar y dolor abdominal por retención de heces y gases.

Suele ser un dolor que aumenta a lo largo del día de forma intermitente, llegando a su máximo en la tarde-noche o durante la defecación.

Mejora tras hacer caca, una vez calmado el dolor de expulsión.

Recomendaciones:

Es algo casi inexistente en lactancia materna.

En lactancia artificial podemos recurrir a Fórmulas Antiestreñimiento. Puntualmente puede ayudarse a defecar con Sonda Rectal lubricada.

Pseudoestreñimiento del Lactante

En las primeras semanas de vida el tono del esfinter anal voluntario va aumentando hasta ser capaz de retener completamente las heces si no se relaja.

El bebé pasa así de hacer deposiciones casi con cada toma, a hacerlas sólo cuando relaja el ano.

Si no lo hace con frecuencia puede generar dolor por distensión abdominal al dificultar la eliminación de heces y gases.

Criterios de Inclusión:

Dificultad para expulsar las heces, pese a que cuando salen no son duras.

– Es un fallo de coordinación entre el movimiento intestinal y la relajación del ano.

– Acaba superándose en cuestión de días o semanas, cuando el bebé aprende a coordinar la relajación anal con el movimiento intestinal.

– Aprieta intentando hacer caca tras cada toma. Los pujos son cada vez más intensos y dolorosos conforme acumula tomas sin evacuar.

Recomendaciones:

  • En las crisis de llanto inconsolable en las que intenta hacer caca sin poder: Estimulación con Sonda Rectal Lubricada.
  • Si pasa días sin hacer deposiciones pero no hay crisis de llanto inconsolable ni distensión abdominal: NO hacer nada. Se trata de Pseudoestreñimiento por Absorción Completa. Algo muy frecuente en Lactancia Materna.

Reflujo Ácido

Criterios de Inclusión:

En las primeras semanas de vida va aumentando la producción de ácido del estómago.

El bebé pasa de echar bocanadas de leche blanca-amarillenta a echar bocanadas de leche cortada. Con líquido transparente y grumos blancos.

Las bocanadas van aumentando en volumen conforme el bebé toma cada vez cantidades mayores y se mueve más. Pero mientras no haya dolor y gane peso, las bocanadas no son un problema.

Si la producción de ácido es excesiva, aparece pirosis. Lo que notaremos será una interrupción de la toma con llanto intenso de dolor arqueándose hacia atrás. Seguido de varios intentos de volver a tomar, ya que sigue con hambre. Pero en cada nuevo intento el bebé vuelve a llorar.

Otros síntomas que suelen acompañar en el Reflujo Ácido son:

  • Lengua saburral blanca, marrón o verdosa. Se produce por efecto del ácido sobre la zona dorsal posterior de la lengua.
  • Un aumento del Hipo. Se hace más frecuente y persistente.
  • Mucosidad en la garganta por irritación de la mucosa faríngea, con una tos irritativa en aumento.
  • Aliento ácido.
  • Muecas de asco frecuentes.
  • Despertares frecuentes con llanto cuando está tumbado.
  • Las crisis mejoran con el niño en vertical.

Importancia del tratamiento del reflujo ácido:

Además del dolor que sufre el niño, que ya es motivo suficiente para tratarlo, un reflujo no tratado puede dar lugar a una mala relación con la comida y el sueño que puede persistir durante años.

Recomendaciones:

Podemos tratar el reflujo ácido con:

  1. Medidas posturales:
    1. Colchón antireflujo.
    2. Porteo.
    3. Tomas en posturas más verticales.
  2. Antiácidos:
    1. En este estudio se usó el Omeprazol. Se evidenció una mejora clara de los síntomas entre 3 y 5 días después del inicio del tratamiento.
    2. Tras 2 semanas sin síntomas se baja paulatinamente la dosis para averiguar la dosis mínima efectiva. Este proceso se repite cada 2 semanas hasta llegar a suprimir el tratamiento. Haciéndolo así evitamos la anemia y el raquitismo que una dosis innecesaria de antiácido pueden ocasionar.
  3. Evitar agravantes: La mayoría de los niños con Reflujo Ácido empeoran cuando toman Vitamina D, por lo que recomiendo suprimirla en estos casos. Y muchos casos tienen una recaída evidente cuando se vacunan contra el Rotavirus, por lo que en niños con Reflujo intenso recomiendo no poner esta vacuna.
  4. Alergia en la base: No es raro ver Reflujos persistentes en los que hay como base una alergia a las proteínas de la leche de vaca. Debemos considerarla cuando no acaban de mejorar con el tratamiento del reflujo o este se prolonga.

Como decía anteriormente es frecuente que muchos niños presente simultáneamente diversos problemas con llanto que ceden cuando se tratan todas las causas implicadas de forma simultánea.

Desde que aplico este protocolo realmente no he visto un sólo caso de Cólico del Lactante detrás del cual no haya uno o varios problemas identificables y tratables.

En mi opinión el diagnóstico de Cólico del Lactante debe ser suprimido de las Guías Clínicas de Pediatría y sustituido por un proceso de Diagnóstico Diferencial.

Categorías
Alergias e Intolerancias Alimentación Complementaria del Bebé Alimentación del Bebé y el Niño Autonomía Bebé de 2 meses Blog Conducta del Bebé y el Niño Cuidados del Bebé y el Niño Edad del Bebé o Niño Enfermedades Crónicas en Bebés y Niños Higiene del Bebé y del Niño Infecciones en Bebés y Niños Lactancia Materna

Adivinanza: ¿Por qué tu bebé se mete las manos en la boca?? No son los dientes….?

Los bebés se meten las manos en la boca, pero no es por los dientes. Sino para cosas mucho más importantes.

Comprender porqué los bebés hacen lo que hacen es muy interesante, especialmente para orientarnos sobre cómo debemos actuar nosotros en la crianza.

Sabes que cada bebé se desarrolla a una velocidad diferente, pero que hay cosas que prácticamente todos los bebés hacen en unas fechas parecidas.

La mayoría de los bebés, en torno a los 2 meses, se meten constantemente las manos en la boca. ¿Sabes la causa?

Ya te he dado una pista en el título: No es por los dientes.

La dentición en mucho más variable: Hay niños que nacen con algún diente y niños a los que el primer diente les sale con más de un año. Pero independientemente de cuándo empiecen a salir los dientes la mayoría de los bebés se mienten las manos en la boca en torno a los 2 meses. 

Lo que voy a explicarte ahora es resultado de cosas que estamos descubriendo en los últimos años. Cosas que hace tan sólo 10 años ni siquiera imaginábamos. Así de rápido está aumentando nuestro conocimiento….

Los Instintos del Bebé y la Selección Natural

Durante muchos años, en pediatría, como en otras muchas áreas de conocimiento, hemos puesto normas y establecido explicaciones sobre cómo se debían hacer las cosas con un conocimiento muy limitado de cómo funcionaban sin nuestra intervención.

La naturaleza es mucho más compleja de lo que imaginábamos. Incluso de lo que hoy en día podemos intuir, pero nos vamos acercando y cada cosa nueva que conocemos nos asombra, formando un puzzle que poco a poco empieza a tener sentido.

Debemos acercarnos a ese conocimiento con humildad, reconociendo que mucho de lo que hicimos hasta ahora, con toda nuestra buena intención, puede haber sido un error.

El punto de partida de un nuevo enfoque en Pediatría está siendo empezar a entender cómo funciona la adaptación del bebé a entorno sin nuestra intervención. Y no alterar esa adaptación sin comprender las razones por las que tras miles de generaciones de prueba y error natural las cosas han llegado a ser como son.

Partimos de la premisa de que la Naturaleza ha ido probando mutaciones genéticas y las que han progresado hasta la actualidad lo han hecho porque generan una mejor supervivencia.

Las conductas instintivas están codificadas en nuestro ADN, por eso la mayoría de los bebés tienen una especie de Programación de Desarrollo Normal que van cumpliendo como Hitos del Desarrollo.

Un bebé hace lo que hace cuando lo hace, porque está preparado para hacerlo y porque hacerlo es necesario en su adaptación al entorno.

¿Qué utilidad tiene que un bebé se meta las manos en la boca?

Que sepamos por ahora:

  1. Es una forma de conseguir estímulos para su desarrollo cerebral. Cuando hablamos de las necesidades de los bebés entendemos que precisa respirar, comer y dormir, pero la mayoría de la gente ignora que hay otra cosa sin la que un bebé no puede sobrevivir: Estímulos. Somos en realidad procesadores de información. Cuando crecemos nos adaptamos al entorno en el que vivimos y lo hacemos procesando tanta información como podemos de ese entorno, porque nuestra supervivencia depende de ello. En torno a los dos meses los bebés tienen especialmente desarrollada la sensibilidad de la boca y la lengua y una fuente de estímulos importante el meterse las manos en la boca.
  2. Es un paso previo a la alimentación complementaria. No puedes llevarte alimentos a la boca si previamente no eres capaz de llevar tu mano a la boca. Para alimentarte necesitas dirigir la mano al alimento, hacer la pinza sugetándolo y llevar el alimento a la boca. El paso más simple de este proceso es dirigir la mano a la boca.
  3. Mastica. Otro paso imprescindible para alimentarte con sólidos es masticar. Pero un bebé durante los dos primeros meses de vida no mastica, succiona. Es el movimiento básico que ha usado para alimentarse con la leche. En este movimiento están implicados unos músculos y unos movimientos concretos. Sin embargo, cuando empiece a tomar sólidos va a tener que hacer cosas nuevas: Desplazar los alimentos en la boca con la lengua y masticar. Es todo un proceso complejo para transformar un alimento sólido en un bolo fácil de tragar. Cuando tu bebé se mete las manos en la boca verás que juega con la lengua y muerde la mano. Está practicando. ¡Déjale que lo haga!
  4. Aumentar la producción de saliva.  ¡Esto sí que van a ser los dientes! ¿A que sí? ¡Pues no! Cuando meten la mano en la boca estimula la salivación y esto es necesario también para cuando empiece a comer sólidos, porque va a necesitar más saliva para deshacer y lubricar esos sólidos, haciendo el primer paso de la digestión y facilitando la deglución.
  5. Se provoca arcadas. Cuando empiece a tomar sólidos uno de los riesgos asociados es que se puede ahogar. Llama la atención que los bebés se meten los dedos y la mano en la boca hasta el punto de llegar a provocarse arcadas. Pero es otro movimiento con una coordinación compleja que va a necesitar si cuando coma sólidos un trozo se va hacia donde no debe. De nuevo, cuando se provoque arcadas déjale: Está practicando para no ahogarse cuando coma sólidos.

Quitarle a un niño las manos de la boca y ponerle un chupe es interferir en todos estos procesos. ¡No lo hagas!

Pero hay más… Hablemos de autonomía:

Cuando un bebé se entretiene con su mano en la boca y luego con objetos, como decíamos está cubriendo una de sus necesidades básicas. Seguramente durante los primeros meses has tenido la sensación de que tu bebé demanda constantemente atención. Unos más que otros.

Esto es así porque no puede cubrir por sí mismo esa necesidad de estímulos cambiantes que precisa su cerebro para desarrollarse.

Cuando empieza a jugar con su manos y más tarde con objetos que se mete en la boca está empezando a explorar en la medida que le permite su propia capacidad. Es un proceso que va a hacer cada vez más autónomo en su capacidad de explorar su entorno y adaptarse a él. De nuevo, limitar ese proceso a un sólo objeto como es el chupe es limitar su autonomía ya desde los primeros pasos.

Y más… ¿Qué pasa con el sueño?

Las tres necesidades básicas, que como no me harto de decir son Comer, Estímulos y Dormir, están siempre en un juego de equilibrios. Para que un bebé se duerma tiene que tener razonablemente cubiertas su necesidad de comida y estímulos.

Cuando tiene sueño y falta alguna de ellas vemos como el bebé “se pelea con el sueño”. Y acaba durmiéndose cuando cubrimos la falta de estímulos (por ejemplo meciéndolo) o de comida.

Esto hace que muchos bebés aprendan a dormirse con rituales que necesitan nuestra colaboración en los que básicamente aportamos estímulos hasta que tiene el tope cubierto para que le permita dormirse:

  • En brazos mientras lo mezo.
  • Con el chupe en la boca.
  • En el carro paseando.
  • Con objetos que se mueven, hacen ruido o generan luces.

El problema es que todos estos son rituales que dependen de que nosotros los completemos. Generamos así Rituales de Sueño Dependientes. En pocos meses el cerebro madurará y tendrá unos ciclos de sueño bien definidos. Ciclos entre los que, para enlazarlos, tiene que realizar sus Rituales de Sueño. Si sólo dispone de rituales que dependen de nuestra colaboración es habitual que nos pidan hacerlo entre 5 y 10 veces en una noche.

¿Pero qué pasa con los niños que cubren su necesidad de estímulos por sí solos?

Un bebé que aprende a entretenerse con su mano en la boca es fácil que acabe durmiéndose así. Está cubriendo por sí mismo la falta de estímulos y puede hacerlo hasta llegar al nivel que le permita dormirse sin nuestra ayuda.

Son los bebés capaces de hacerlo los que por encima de los 4-7 meses siguen durmiendo con menos de 2 despertares cada noche. Piensa en esto cada vez que le quites la mano de la boca….

Y mucho más… Desarrollo Inmunitario

Cada vez sabemos más sobre el desarrollo del sistema defensivo de los bebés y empezamos a entender porqué están aumentando los problemas asociados a su mal funcionamiento.

El sistema defensivo necesita para modularse adecuadamente:

  1. Un volumen de actividad mínimo, que en muchos casos no cubrimos. Uno de los avances que ha mejorado la supervivencia infantil ha sido la Salubridad. Tenemos unas condiciones higiénicas inigualables en cualquier época previa de la humanidad. Esto es útil para reducir la frecuencia de infecciones. Pero nos hemos pasado. El sistema defensivo al nacer debe empezar un proceso en el que tiene que ir clasificando todos los gérmenes con los que va a convivir en este mundo y tiene que hacer una respuesta ante ellos gradual, de forma que los mantenga a raya, pero sin generar un daño excesivo en el propio cuerpo.
  2. Inmunidad Pasiva. Siempre se ha realizado una parte importante de esta clasificación y respuesta a los gérmenes en los primeros meses de vida, mientras el sistema defensivo cuenta con tutela por parte de la inmunidad de la madre. Esta tutela se produce por dos vías:
    1. Los anticuerpos recibidos a través de la placenta durante el embarazo. Estos anticuerpos actúan desde el primer día de vida bloqueando a todos los gérmenes contra los que la madre ha generado anticuerpos en toda su vida. Pero no sólo los bloquean, avisan al sistema defensivo del bebé y lo activan haciendo que responda ante esos gérmenes y desarrolle sus propios anticuerpos.
    2. Los que sigue recibiendo a través del pecho con la Lactancia Materna. Los anticuerpos maternos recibidos a través de la placenta se perderán a partir de los 4-6 meses hasta desaparecer por completo antes del año. Pero si toma lactancia materna:
      1. El bebé seguirá recibiéndolos en la leche.
      2. Y recibirá anticuerpos nuevos que la madre genera de las infecciones que sufra durante la lactancia. Es decir de aquellas infecciones que ataquen durante este periodo y posiblemente afecten también al bebé.
    3. Que en este periodo de Inicio Tutelado el bebé clasifique y responda con ayuda de las defensas de la madre a una mayor proporción de gérmenes hace que esté mejor preparado para la fase posterior en la que tendrá que hacer el trabajo por sí mismo. Por lo que criarlo en un ambiente excesivamente limpio limita ese entrenamiento dejando al bebé sólo ante el peligro sin haber regulado adecuadamente sus Defensas. Dejar que el bebé se meta las manos en la boca (sin limpiarle con las toallitas de forma compulsiva) y que contacte con el mayor porcentaje posible de gérmenes mientas cuenta con la ayuda de la inmunidad de su madre favorece un mejor ajuste del Sistema Defensivo.
  3. Microbiota. Cada vez conocemos mejor a nuestra flora saprofita: Esos gérmenes con los que convivimos y que en muchos casos pueden ayudarnos en nuestra Nutrición, desarrollo Neurológico e Inmunitario o generar problemas en esos campos. Una de las claves que influyen de forma clara según los últimos estudios es que cuanto mayor es la variedad de gérmenes que componen nuestra flora menos problemas. En el estudio que os he enlazado se demuestra por ejemplo que la Enfermedad Inflamatoria Intestinal se asocia con floras intestinales pobres. Porque cuando la variedad es escasa es más fácil que uno de los gérmenes se haga con el dominio del intestino generando una agresión. Dejar que tu hijo se meta las manos en la boca tocando por todas partes es la forma en la que aumenta la variedad de esa flora. 

Y por último, Tolerancia Alimentaria

Todos estos pasos que he descrito, son necesarios para que lleguemos al pasos siguiente bien preparados: Alimentación Complementaria.

Para tener éxito en la alimentación completa vamos a necesitar esa coordinación de la mano llevando objetos a la boca, la capacidad de formar el bolo alimenticio con movimientos de la lengua, masticación y salivación y una deglución segura en la que la arcada nos defienda si algo no va bien.

Pero además necesitaremos tener un sistema defensivo con la madurez suficiente para mantener a raya a todos los gérmenes que van a entrar acompañando a los alimentos, y hacerlo sin cometer errores que le hagan dañar el intestino (enfermedad inflamatoria intestinal) o responder frente a lo que no nos agrede, sino que es el objeto de nuestra alimentación (alergias alimentarias).

Cuando estamos preparados, entre 6 y 10 semanas después de empezar a llevarse las manos a la boca, el bebé empieza a mostrar interés por nuestra comida cuando nos ve alimentarnos y activamente intenta llevarse alimentos sólidos a la boca.

Lo hace cuando lo hace porque está preparado, con todo el proceso previo, y porque lo necesita: Este momento suele coincidir con la etapa en la que el bebé empieza a agotar las reservas de micronutrientes que consiguió durante el embarazo y no están presentes en cantidad suficiente en la leche.

Hacerlo además de forma precoz, mientras cuenta con la ayuda de los anticuerpos maternos que pasaron durante el embarazo y siguen llegando con la Leche Materna,  se ha demostrado que reduce la aparición de alergias alimentarias.

Resumiendo: ¡Hay que ver qué bien hecho está el bebé! Entender toda su capacidad innata para adaptarse al mundo es clave para no interferir con nuestros cuidados generando problemas.

Deja que se meta las manos en la boca, ¡Y si no están limpias MEJOR!

Y éramos tan inocente que pensábamos que lo hacía simplemente porque le iba a salir un diente😂😂😂😂

Categorías
Alergias e Intolerancias Alimentación del Bebé y el Niño Bebé de 2 meses Bebé de 3 meses Blog Digestivas Edad del Bebé o Niño Infecciones en Bebés y Niños Lactancia Artificial Lactancia Materna Primer Mes de vida del Bebé Urinarias

¿Qué puedo hacer si mi bebé echa muchas bocanadas? ?

Qué hacer si tu bebé echa bocanadas.

Prácticamente todos los bebés echan bocanadas. En la mayoría de los casos no son nada serio. Pero te explico las causas más habituales y qué hacer cuando ocurren.

En la etapa en la que el bebé toma sólo leche, la expulsión de esa leche es algo muy, muy habitual. No lo hacen el 100% a diario, pero casi.

Bocanadas normales en el bebé

Cuando esto ocurre la causa más frecuente es simple. El estómago del bebé no tiene un cierre efectivo en su parte superior. Es como una bolsa de agua caliente sin tapón. Si la llenas de leche y presionas, rebosa.

A veces la presión la hace el propio bebé al moverse apretando la barriga o moviendo las piernas… Otras veces lo hacemos nosotros al cambiarle de postura. Pero no te preocupes, es algo muy normal y no le has hecho ningún daño.

Muchos piensan que conforme crece irá echando menos. Pero lo normal es lo contrario. Cuanto más crece, más come y más se mueve. Y si esto ocurre las bocanadas suelen ir a más.

Mejoran sin hacer nada cuando el bebé empieza a comer alimentos sólidos, más fáciles de retener y se acaba formando un pliegue en la salida superior de sus estómago que actúa como válvula (el cardias).

Si nos preocupan y queremos que haya menos bocanadas la solución no es espaciar las tomas. Cuanto más las separemos mayor cantidad tomará en cada toma, y si llenas mucho el estómago hay más bocanadas. Lo que te recomiendo es precisamente lo contrario: Dale con más frecuencia. Al hacerlo el bebé irá tomando cantidades menores que caben mejor en su estómago y las bocanadas se reducirán.

La duda más frecuente es ¿Lo ha echado todo con la bocanada?

Si esto nos preocupa es en parte porque pensamos que si echa la leche no va a alimentarse bien. Pero es que con las bocanadas se echa sólo una parte. Son muchas las familias que me dicen que ellos creen que no le ha quedado nada dentro.

Hay una forma fácil de saberlo: ¿Gana peso? ¿Llora por hambre?

Si gana peso y cuando llora le damos de comer y se calma aunque eche, está quedando suficiente en su interior para alimentarle.

Si las bocanadas se acompañan de un llanto inconsolable o de pérdida de peso, entonces hay que buscar la causa, porque hablamos de otra cosa…

Cuando el bebé echa Leche y Sí es un Problema (algo más que bocanadas)

Si la expulsión se acompaña de llanto o malestar evidente en el bebé o el peso va ma hay que descartar varios problemas:

  1. Gastroenteritis. Cualquiera puede sufrir una infección que afecte al tubo digestivo. No son muy frecuentes en los primeros meses de vida porque el bebé cuenta con los anticuerpos de su madre en su sangre y es inmune a todas las infecciones que ella haya superado en su vida. Pero a veces algún virus nuevo se presenta y desarrolla una gastroenteritis. Suelen presentar algo de moco, fiebre y empiezan con vómitos. En alguna ocasión después viene la diarrea y otras no. Lo más característico de la infección es la fiebre. Siempre que la hay debemos pensar en infección. El tratamiento en bebés suele ser dar un probiótico, fraccionar las tomas de leche, dándole cantidades más pequeñas más veces y tratando la fiebre si sube con antitérmicos. Si los vómitos son frecuentes puede darse un medicamento para cortarlos y en los casos más intensos puede necesitar un suero para rehidratarlo.
  2. Infección de Orina. Otra infección que puede acompañarse de vómitos con facilidad es la de Orina. Debemos pensar en ella cuando un bebé está irritable, con fiebre, orina que huele más fuerte o más oscura y rechazo del alimento con vómito fácil. La forma de saber si hay infección de orina es analizar la orina y si se confirma infección daremos tratamiento con antibióticos.
  3. Algunas Infecciones Respiratorias. En Catarros, Bronquitis y otras infecciones en las que hay mucho moco, algunos bebés tienen facilidad para vomitar con la tos. Los vómitos suelen mejorar al tratar la mucosidad.
  4. Alergias alimentarias. Cuando un bebé toma algo en la leche que no tolera puede vomitar tras tomarla. El vómito no se diferencia de la bocanada por la cantidad o la fuerza con que expulsa, sino porque antes de echar está molesto y cuando echa la cara se pone pálida y sudorosa. Si no tiene fiebre, en lugar de pensar en infecciones (aunque las puede haber sin fiebre) solemos pensar en alergias. La más frecuente en la leche es a las proteínas de la leche de vaca. Cuando toma biberón suele mejorar al cambiar la leche adaptada normal por una hidrolizada. Y si toma pecho hay casos en los que el problema es uno de los alimentos que toma la madre y pasa a través del pecho.
  5. Estenosis Hipertrófica de Píloro. Mucho menos frecuente que los casos anteriores, pero se ve a veces. Es un problema más frecuente en bebés varones y consiste en que el cierre inferior del estómago (píloro) tiene tanta fuerza que impide que el contenido del estómago pase al intestino. Lo que vemos es que de repente un niño que comía perfectamente echando alguna bocanada, sigue queriendo comer, pero al poco de acabar expulsa cada vez más cantidad de leche hasta que llega el momento que lo hace en todas las tomas y el peso empieza a bajar. Puede diagnosticarse mediante una Ecografía.

Como siempre la información general orienta, pero en muchos casos hay que hacer una valoración más individualizada para ver la causa y la solución.

Recuerda que puedes consultar a tu pediatra y que yo estoy a tu disposición Online.

Categorías
Bebé de 2 meses Blog Botiquín para atender Bebés y Niños Cuidados del Bebé y el Niño Infecciones en Bebés y Niños Vacunas

Vacunas y Antivacunas

Vacunas y Antivacunas. Quiero saber los motivos que te llevan a ser Antivacunas.

Uno de los temas con mayor conflictividad en Pediatría: Las vacunas. ¿Son buenas o malas? ¿Son seguras? Todos los pediatras atendemos famílias antivacunas.

En muchas ocasiones me habéis pedido que aborde este tema. Y hasta ahora no lo había hecho de forma directa en un artículo concreto. Creo que ha llegado el momento.

La primera pregunta evidente es ¿Soy provacunas o antivacunas?

Sabéis que a mí me gustan los matices. Pero hablando de forma general:

Soy Pediatra, y a diario recomiendo a las familias que vacunen a sus hijos.

Las vacunas para mí son una herramienta que ha contribuido claramente a la reducción de la mortalidad infantil y evitan infecciones que pueden generar secuelas graves. Ya quisieran muchas familias de países sin medios disponer del calendario vacunal de España.

Esto no significa que defienda cualquier vacuna y de cualquier manera. O que ignore que como cualquier actuación también las vacunas tienen efectos indeseados.

Ahora vamos con los matices…

¿Qué opino de los antivacunas?

Creo que son personas que, al igual que yo, quieren lo mejor para los niños. Personas que están preocupadas por los efectos secundarios que puedan generar las vacunas. Y que con la información de la que disponen, llegan a la conclusión de que prefieren no vacunar.

Para mí su intención merece mi respeto. Y su búsqueda de conocimiento también.

Como padres, somos los últimos responsables del bienestar de nuestros hijos. Y tomar una decisión en la que cualquiera de las dos opciones puede generar un daño es complicado.

A veces no se puede elegir entre lo bueno y lo malo, y hay que escoger entre lo malo y lo menos malo. Podemos pensar que la mejor opción es no hacer nada. Pero esta ya es una decisión en sí misma, con sus consecuencias.

Con toda la información de la que dispongo, las cuentas a mí no me salen para ser antivacunas… Los efectos secundarios que pueden atribuirse a las vacunas son, con los datos de los que dispongo, mucho menores que los efectos negativos de no vacunar.

Pero reconozco que tal vez no dispongo de toda la información…

Así que ¡quiero saber más!

Hace muchos años que dejé de pensar que poseo la verdad absoluta.

Especialmente, desde que empecé a escribir en internet he tenido que “comerme con patatas” muchas de las verdades que creía indiscutibles. Y gracias a eso he ido ampliando mis miras, siendo una de las cosas de las que más me alegro.

En muchos conflictos la situación se estanca y empezamos a construir trincheras.

En este caso hay quien desde la posición de defensa de las vacunas ataca a los antivacunas como ignorantes, irresponsables, egoístas, fanáticos….

Y quien desde las filas antivacunas llama a los provacunas ignorantes, irresponsables, egoístas, fanáticos….

El problema es que en medio, entre las dos trincheras, están las familias con sus hijos, que son los que realmente pueden resultar heridos en esta lucha.

Creo que es necesario que alguien salga de su trinchera, se meta en el barro y recorra el camino hasta la trinchera contraria, para ver si hay forma de resolver una lucha en la que los heridos son aquellos a los que ambos bandos pretenden proteger.

Los argumentos a favor de la vacunación ya los conozco, me han formado en ellos.

Quiero conocer los argumentos en contra de la vacunación:

Seas madre, padre o profesional, si te consideras “antivacunas”, me gustaría que me ayudes a tener una visión más completa respondiéndome con la siguiente información a mpediatraonline@gmail.com (no es mipediatraonline, es mpediatraonline):

¿Cuáles son los motivos por los que prefieres no vacunar a los niños?

Sed lo más concretos que podáis.

Agradecería mucho que incluyáis enlaces a información (estudios, vídeos, libros, webs) en los que se profundice en esas razones.

Mi intención no es juzgaros ni rebatiros. Lo que quiero es saber más.

Os lo agradezco mucho.

Por favor, no hagáis de esto una lucha en redes sociales. Creo que provacunas y antivacunas merecen respeto, pues todos están preocupados por el bienestar de los niños y espero que entre todos logremos que ese bienestar mejore.

Categorías
Bebé de 2 meses Bebé de 3 meses Blog Cólico del Lactante Dolor Enfermedades Crónicas en Bebés y Niños

La importancia de tratar los Cólicos del Lactante

Los Cólicos del Lactante marcan la crianza

Los Cólicos del Lactante marcan la experiencia de crianza de muchas familias. La palmadita en la espalda y «a los 3 meses se pasa» puede marcar la infancia.

Cuanto tu bebé llora y no consigues calmarle ¿Sientes que no estás entendiéndolo? ¿Dudas de tu capacidad para criar a tu hijo? ¿Te sientes mala madre o mal padre? ¿Te sientes juzgado por los demás?

Suele decirse de los Cólicos del Lactante que:

  • Hay niños que lloran más que otros.
  • Algunos padres son muy nerviosos y transmiten esa ansiedad al bebé.
  • En realidad son niños sanos sin problemas.
  • Nada funciona y en realidad se acaban pasando solos.

Cuando se dicen cosas así:

  • Se falta a la verdad. Ningún niño sano llora de forma insistente sin que le pase nada. Cuando un bebé llora o le duele algo o tiene una necesidad que no se está cubriendo adecuadamente. En mi experiencia, todos los Bebés con Cólicos del Lactante tienen motivos para llorar. Motivos identificables y tratables. Restarle importancia deja a un bebé pasándolo mal por problemas a los que podemos poner solución si los identificamos.
  • No se entiende lo que el llanto inconsolable de un bebé significa para unos padres. Y menos aún lo que decir que es porque los padres son nerviosos significa para ellos. Los Cólicos del Lactante minan la autoestima de los padres como cuidadores.
  • Se puede marcar la infancia de un bebé. Cuando un problema real hace que un bebé no esté bien se interfiere con su alimentación, con su descanso, con la convivencia del bebé con quienes le rodean. Puede generar problemas que ni mucho menos desaparecen cuando el motivo del llanto desaparezca. En muchos casos marca la crianza de los padres y no de la mejor forma posible.

Cuando un bebé con Cólicos del Lactante no es tratado sigue llorando mientras su problema o problemas (que siempre los hay) siga sin resolverse. Algunos lo hacen de forma espontánea en los meses siguientes. Otros pueden prolongarse mucho tiempo.

Cuando identificamos las causas de su llanto y las resolvemos logramos varias cosas:

  • Desde el punto de vista del Bebé. Deja de llorar porque sus necesidades están cubiertas y no sufre dolor. Pero no sólo hemos logrado que deje de llorar. Lo realmente importante es que hemos descubierto que había cosas que iban mal y las hemos resuelto.
  • Desde el punto de vista de los Padres. Mejoramos el conocimiento que tienen sobre su hijo. No sólo por darles un diagnóstico. Sino porque para resolver los Cólicos del Lactante es indispensable enseñarles pautas básicas de Crianza. Este problema no es resuelto por el Pediatra o el Fisioterapeuta de forma independiente. Es un equipo en el que Fisioterauta, Pediatra y Padres actúan en conjunto y todos son indispensables. Cuando el bebé mejora, también lo hace la autoestima como Criadores de sus padres, que se sienten más capacitados tras colaborar en la mejora de su hijo.

Al principio los Cólicos del Lactante parecen una Maldición para cualquier familia. Todos desearían que su bebé fuese ese típico retoño que no hace más que comer y dormir con el que todos sueñan.

Cuando no es así, y llora sin parar desconcierta, agobia, estropea la relación de los padres con su bebé y entre ellos, porque resulta desesperante.

Pero cuando logramos tratarlo de forma efectiva puede acabar siendo un regalo para los padres: Un desafío que se ha superado en cuya resolución han colaborado aprendiendo muchísimo sobre su hijo.

No te conformes con una palmadita en la espalda.

No te resignes a tu hijo llore de forma inconsolable.

No aceptes que él es así o es culpa tuya.

Busca respuestas, porque las hay.

Este vídeo puede ser una primera aproximación para entenderlo.

Si quieres mi ayuda puedo dártela a través de la Consulta Online.

 

 

Categorías
Alta Demanda Ansiedad Bebé de 2 meses Blog Cólico del Lactante Conducta del Bebé y el Niño Dolor Enfermedades Crónicas en Bebés y Niños Otros temas de Salud Infantil Síntomas del Bebé y el Niño Enfermos

Mi planteamiento sobre el Cólico del Lactante

Bebé sin cólico. Un enfoque diferente al Cólico del Lactante

El Cólico del Lactante es un cajón de sastre. No tiene una solución válida porque en él hay bebés con causas diferentes y diferentes son las soluciones.

Se dice que un bebé tiene Cólico del Lactante cuando:

«Entre las 3 semanas y los 3 meses de vida, llora más de 3 horas al día, más de 3 días por semana, sin otros signos de enfermedad.»

¡Qué bonito, cuanto «3»!¡Y qué absurdo!

Esto no es más que una descripción sin comprensión. No hablamos de causas, no tenemos por dónde cogerla. Y claro a una definición vacía corresponden soluciones que no funcionan. Por eso la lista de «soluciones para el cólico del lactante» es tan larga y no sirve.

Pero es lo que nos explican a todos los pediatras cuando nos formamos. Junto con la solución definitiva: La palmadita en la espalda con la frase «para los 4 meses se quita».

Cuando empecé a ejercer en atención primaria no tardé en darme cuenta de que tenía que haber un planteamiento mejor que ese para este problema.

Lo primero que entendí es que ningún niño llora tanto sin motivo. Siempre lo hay. Así que toca buscar el o los motivos por los que cada niño concreto tiene cólico del lactante.

Lo primero es ver los remedios. Hay que suponer que cuando un remedio concreto se mantiene en la lista es porque a algún bebé le habrá servido para mejorar. Pero el problema es que no hay ningún remedio que sirva a todos.

La deducción es sencilla: El Cólico del Lactante es un cajón de sastre en el que estamos colocando a muchos niños que sólo tienen en común la manifestación a rasgos generales de lo que muestran: Llanto insistente y que no puede calmarse supliendo sus necesidades, en los primeros meses de vida.

Pero cada uno de esos niños está en ese cajón de sastre por una combinación personal de causas que le hacen llorar. Y parece que muchas de ellas tienen tendencia a mejorar con el tiempo de forma espontánea.

La solución al Cólico del Lactante que aplico en la actualidad

Descartar lo que no es cólico del lactante

Todos los niños hacen ruidos. No es raro que muchos padres piensen que su hijo tiene «gases» porque da «apretones» o «pujos» con frecuencia.

En muchos casos le están dando medicación para «los gases», pero cuando les preguntas: «¿Llora mucho?» La respuesta es «no». ¡Pues no es Cólico del Lactante ni tiene más gases de lo normal! Y le des lo que le des va a seguir dando apretones… Hacer ruidos es una de las diferencias entre un bebé una maceta de geranios.

¿Se calma cuando cubres sus necesidades?

Hay niños que lloran mucho, pero lo tomas en brazos y se calla, le das de comer y se calla…

Esto no es cólico del lactante. Es un bebé al que sus padres no están dando lo que necesita, cuando lo necesita. Y esto surge de los consejos erróneos que reciben.

Todavía son mayoría las personas que piensan que hay que:

  • Que hay que dejar a los bebés llorando en la cuna para que «no se acostumbren a brazos».
  • Que hay que marcar un ritmo fijo de las tomas para que «se regule».
  • Que hay que marcarle sus horarios de sueño para que, de nuevo, «se regule».
  • Que hay que echarlo en la cuna tras la toma antes de que se duerma para que «aprenda a dormir sólo».

Esto es no entender a los bebés. Un bebé es un ser vivo. Y como tal se adapta a su entorno. Juegan en un equilibrio de necesidades. En las edades en las que el Cólico del Lactante ocurre son tres, por este orden: «Comer, estímulos, dormir».

Los niños no tienen con esta edad pensamiento consciente. No tienen una estrategia maquiavélica para dominar su entorno. Simplemente cuando tienen hambre, necesidad de estímulos o sueño y no obtienen lo que necesitan, lloran.

El llanto es una manifestación de dolor o insatisfacción. No es otra cosa. Hay quien dice que es normal que cualquier bebé llore un número determinado de horas al día. Yo aún no he visto ninguno que aliviando su dolor o satisfaciendo lo que necesita en ese momento no deje de llorar.

El problema en muchos casos es que los padres no interpretan bien cual es la necesidad que tiene en ese momento para cubrirla.

Especialmente a muchos se les pasa por alto la necesidad de estímulos. Los niños necesitan cambiar de postura con frecuencia y no pueden hacerlo solos con esta edad, necesitan estímulos sensoriales cambiantes y como no pueden cambiar su postura ni el lugar en el que están no pueden conseguir nuevos sin ayuda, y necesitan afecto que sólo puedes darle tú.

Lo que yo aconsejo:

Si un bebé de pocos meses está incómodo, antes de que llore, ofrécele alimento. Darle el pecho o el biberón satisface las 3 necesidades a la vez. Porque quita el hambre, al dárselo en brazos da estímulos de cambio de postura, sensoriales y afectivos y si tiene sueño ayuda a dormir.

Por eso, la solución es mucho más simple de lo que parece. Y de hecho muchos padres lo dicen: «Sólo se calla comiendo». Lo que no significa que sólo tenga hambre.

Cuando sí es Cólico del Lactante

Cuando un bebé sí que llora y mucho, y no se calma al ofrecerle alimento, pero además no tiene fiebre, ni moco, ni tos persistente… y ha sido explorado por un pediatra sin encontrar enfermedad alguna, hablamos entonces de cólico del lactante.

Y es aquí donde mi planteamiento ha evolucionado más, buscando cuales son las causas reales que cuando estudiamos cada bebé con cólico del lactante aparecen.

Es una lista cada vez más larga, pero son patologías conocidas e identificables. Y entonces, ¿porqué no se hace?

El motivo es que se combinan entre sí y que hay grados variables de cada una de esas patologías. ¡Sí, patologías!

Dicho de otro modo: Que el Cólico del Lactante no existe según su propia definición.

Decimos que el Cólico del Lactante son niños que no están enfermos. No es verdad. Tienen enfermedades que no hemos identificado, pero que son identificables y tratables. Muchas de ellas tienen una evolución hacia la curación espontánea, pero puede acortarse de forma importante cuando las identificamos y tratamos.

En la actualidad llevo más de dos años tratando muchos bebés con Cólico del Lactante con este planteamiento y siempre se encuentra una o con más frecuencia varias causas que lo explican. Aún no he encontrado ningún Bebé sano con cólico del lactante.

La clave en la que suele fallarse es que se tratan los posibles problemas de uno en uno y muchas veces se pasan por alto algunos de los presentes. O tratamos todos los problemas de forma simultánea o la mejoría es sólo parcial o inapreciable. 

Y hay que conocer cada uno de esos problemas para identificarlos no sólo en su forma clásica de manifestación, sino también en sus variantes y formas leves.

Cuando identificamos adecuadamente cada una de las causas y las tratamos simultáneamente mi experiencia es una clara mejora del bebé en menos de 10-15 días. Cuando no se alcanza esa clara mejoría valoro que debe haber alguna causa más que no hemos tratado de entrada.

Con este planteamiento todos los bebés con Cólico del Lactante dejan de tener esa calificación para tener diagnósticos y tratamientos concretos. Y lo más importante, una mejoría clara.

Porqué es importante resolver el cólico del lactante cuanto antes

Hay quien dice que como se va a resolver sólo en la mayoría de los casos antes de los 4 meses de vida, pues ya está, paciencia.

Yo no estoy nada de acuerdo, porque ¿qué significa para un bebé y sus padres tener un cólico del lactante durante meses?

  • Significa para empezar un sufrimiento evitable. Sólo eso debería ser motivo suficiente para no rendirse en la búsqueda de sus causas.
  • Significa para unos padres una experiencia de paternidad marcada por la inseguridad. Por el sentimiento de que su hijo sufre y no saben cómo ayudarle.
  • Significa un bebé que crece teniendo una mala relación con la alimentación y con el sueño que puede perpetuarse durante años.

Si es lo que hay y no tenemos solución, ¿qué le vamos a hacer? Pero no es mi experiencia. Mi experiencia es que cada bebé con Cólico del Lactante tiene unos motivos tratables y que podemos hacer que mejore mucho antes de lo que lo haría de forma espontánea.

Podemos evitar antes que siga sufriendo.

Podemos ayudar a los padres a conocer mejor a su hijo para que colaboren en su mejoría dándoles el conocimiento necesario para que cuiden mejor de él y sepan suplir sus necesidades.

Podemos evitar que un problema puntual arrastre sus consecuencias durante mucho tiempo.

Si quieres que te ayude en tu caso, puedes hacerme una consulta online  o visitarme en Mi Consulta en Granada.

Categorías
Bebé de 2 meses Bebé de 6 meses Blog Edad del Bebé o Niño Infecciones en Bebés y Niños

¿Por qué mi bebé babea mucho?

Por qué mi bebé babea

¿Babéa mucho tu bebé? Te dirán que eso van a ser los dientes. Pero esa es sólo una de las causas y no la más frecuente. Te cuento las más habituales y las que realmente pueden ser importantes.

Para entender por qué un bebé babea mucho lo principal es su edad.

Yo distinguiría entre los bebés que empiezan a babear en torno a los dos meses, mentiéndose las manos en la boca, y los que ya más adelante lo hacen, entre los 6 y 12 meses. Y por último el que sin meterse las manos en la boca empieza a babear mucho.

El bebé de en torno a 2 meses que empieza a babear metiéndose las manos en la boca

Es un paso clave del desarrollo de las habilidades para alimentarse.

Aunque cuando lo ven casi todos te dirán que está preparándose para la salida de los dientes, raramente salen tan pronto.

Cuando un bebé pasa el primer mes y medio, dos meses, suele tener cubiertas sus necesidades de comida y sueño de forma regular. Y empieza a ganar protagonismo la tercera: La necesidad de estímulos.

Como parte de esa necesidad de estímulos, el niño descubre sus manos y tiende a llevárselas a la boca para explorar nuevas sensaciones. Se entretiene jugando con sus manos en la boca.

Y cuando introduce las manos en la boca, se estimula la salibación. Por eso empieza a babear.

Podría pensarse que es un entretenimiento sin mucha importancia. Pero en realidad juega un papel fundamental para cuando llegue la alimentación complementaria:

  1. Llevarse las manos a la boca es necesario para llevarse alimentos a la boca en la fase posterior.
  2. Mascar, morder los dedos y jugar con la lengua le da una movilidad que no estaba ejercitando con el chupeteo y que va a ser necesaria para procesar los alimentos sólidos.
  3. Esa salivación aumentada es necesaria para ablandar, lubricar y tragar mejor los alimentos sólidos.

Por tanto babea como parte de un plan de desarrollo definido instintivamente. No tiene nada que ver con los dientes.

Bebé de 6-12 meses que babea mucho metiéndose las manos en la boca

Es aquí, entre los 6 y 12 meses cuando realmente suelen salir los primeros dientes.

Lo que podemos notar cuando ocurre es que el bebé tiende a morder con la zona en la que los dientes están a punto de salir. Si miramos esa zona de la encía la veremos ensanchada y puede que nos sorprendamos con los primeros picos de los dientes asomando en ella.

En esta fase tampoco la saliva es algo inútil: Contiene sustancias que nos protegen de las infecciones y alivian el dolor.

Bebé que babéan mucho sin meterse las manos en la boca y comen peor

De todas las posibilidades de babeo, ésta es la única que indica que algo va mal.

Cuando un niño empieza a comer mal y claramente hay un aumento del babéo sin meterse las manos en la boca suele ser un sigo de que le duele mucho al tragar. El dolor es tan intenso que le impide incluso tragar su propia saliva.

Suele estar causado por alguna infección viral que produce llagas en la boca. Estas llagas duelen tanto que el simple gesto de tragar resulta muy doloroso.

En muchos casos, si miramos en el interior de la boca veremos también alguna llaga en la lengua o en el interior de las mejillas y los labios.

Llévalo a su pediatra para que te confirme la infección y te recomiende el tratamiento adecuado.